La percepción de la «belleza» a menudo implica la interpretación de alguna entidad que está en equilibrio y armonía con la naturaleza, y puede conducir a sentimientos de atracción y bienestar emocional. Debido a que constituye una experiencia subjetiva, a menudo se dice que «la belleza está en el ojo del observador».1 aunque tal relativismo es exagerado y suele asociarce a cosmovisiones y modas, lo concreto es que existen objetos y seres que dan la impresión de belleza ya desde su objetividad natural porque se corresponden con los requisitos naturales del Homo sapiens, por ejemplo: el sabor dulce es preferido al amargo porque el amargo suele corresponder a tóxicos, lo mismo que la fragancia de muchas flores se prefiere naturalmente en gente psíquicamente sana al hedor pútrido.
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me atrae mucho tu blog debido a que habla sobre la belleza del ser humano y nos da informacion sobre como vernos mejor.
ResponderBorrarWOWWWW BELLEZAAAA
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